Toda máquina cuyo movimiento sea generado por un motor (eléctrico, de explosión u otro) necesita que la velocidad de dicho motor se adapte a la velocidad necesaria para el buen funcionamiento de la máquina. Además de esta adaptación de velocidad, se deben contemplar otros factores como la potencia mecánica a transmitir. Esta adaptación se realiza generalmente con uno o varios pares de engranajes que adaptan la velocidad y potencia mecánica montados en un cuerpo compacto denominado reductor de velocidad.
Cuando los reductores son accionados por motor eléctrico se denominan motorreductores.
Un mecanismo para automatismo es cualquier mecanismo que sirva para realizar una acción de forma automática. Pueden ser utilizados para subir una persiana, abrir una puerta o girar un espejo.
La aplicación de los reductores, motorreductores, y mecanismos para automatismos es muy variada, y se aplica en campos tan dispares como la construcción (para automatismos en persianas, puertas, ventanas…), automoción (ventanillas, puertas, retrovisores…) seguridad (cajas fuertes), juguete, etc.